Vaya, ya llevaba varios días sin escribir en mi blog por causas ajenas como trabajos que tengo que hacer de clase, poco tiempo y esa enfermedad tan común conocida como “vaguitis”. En fin, espero compensar estos días con un buen post = )
Hoy os voy a enseñar (o intentar) a doblar cucharas con la mente. Parece complicado pero ya Uri Geller lo hizo, aunque según he leído por las webs, dicen que tiene truco (como todo en esta vida). Así que lo primero que voy a hacer es deciros cómo en teoría se pueden doblar con el poder de nuestra mente y luego os voy a dar una versión que nos revela el truco de Geller.
Bueno, la verdad es que para enseñaros a doblar metal con la mente tendría que hacer un post demasiado largo y que no os llamaría la atención. Así que os voy a dejar con un enlace que os da un curso de cómo hacerlo (es un poco largo de leer)
Respecto a cómo lo hacía Uri Geller y cómo lo podéis hacer vosotros fácilmente, os dejo con la siguiente información:
Doblado de cubiertos con fricción de los dedos
Como las cucharas y tenedores son pequeños y de metales blandos, presentan grandes ventajas en su manipulación. En primer lugar, el material de los cubiertos permite su doblado con una sola mano; sólo hay que tomar el cubierto por el mango y hacer presión en la parte cóncava con el dedo pulgar. Esto se puede hacer cuando nadie está mirando. Para distraer al público se puede utilizar cualquier excusa, como una breve introducción sobre la naturaleza de los "poderes psíquicos".
Una vez que se haya doblado la cuchara, se oculta el doblez con la mano y se muestra la parte cóncava, haciendo como si aún estuviera recta. Luego se comienza a frotar suavemente el doblez, a medida que se deja ver gradualmente. Si se hace con suficiente destreza, se genera la impresión de que el metal se dobla suavemente. Cuando se descubra completamente el cubierto, los espectadores lo encontrarán doblado.
El efecto se acentúa si se sugestiona a los observadores. Si se va diciendo "se dobla... se está doblando... miren cómo se dobla..." mientras se frota la cuchara, aumentará el efecto sobre el público.
Otra variante de este truco consiste en hacer que el cubierto se rompa en dos partes. El principio de éste es algo diferente. Basta con preparar la cuchara doblándola fuerte y repetidamente hasta que se genere fatiga en el metal. El estado de fatiga del metal es uno en el cual el material aparentemente está intacto, pero microscópicamente está repleto de microfracturas.
Con la cuchara así preparada, se comienza un tratamiento de flexión suave, usando la menor fuerza posible, hasta que ésta termine rompiéndose.
Fuente: http://www.escepticoscolombia.org/
1 comentario:
Tambien creo que para hacer su truco mas facil preparan las cucharas para que se doblen rapido, realmente yo no creo que sea algo inusual o sorprendente al menos que les de una cuchara de mi cocina y logren doblarla :)
Publicar un comentario